Batir las claras de los huevos a punto de nieve firme. Añadir el azúcar y trabajarlo bien hasta formar un merengue; después poner la almendra molida. Cuando la pasta esté hecha, se parte por la mitad y se hacen dos bolas. Aplanamos una de las bolas, la colocamos sobre una plantilla de oblea y le ponemos por encima la crema que hemos preparado con el calabazete rallado mezclado con las yemas de tres huevos. A continuación, la taparemos con la otra bola restante –la cuál habremos extendido sobre un plástico mojado.
Para finalizar, lo decoramos con medias nueces y le damos unas pinceladas con la yema restante.
Ponerlo en el horno en una bandeja con harina durante 20-25 minutos a temperatura máxima.
CONSEJO: se le puede añadir cereza confitada al adorno. Es conveniente vigilar el proceso de cocción.